El lunes fui a Albacete para recibir un premio de la Fundación FAMA, y aquí os traigo tres imágenes del acto.
Era un modeste 3º Premio, no contemplado en las bases, que sólo anunciaba dos, pero que excepcionalmente me concediero, dicen que por la calidad de mi relato. Lo agradezco en el alma.
El tema era la superación personal para discapacitados.
Debo decir que el 1º y 2º premio fuenon narraciones verdaderamente conmovedoras y que inyectaban entusiasmo. La mía se titulaba "Alquimista de la mente" y versaba sobre el poder mental para procurar la felicidad.
Aquí aparecemos muchos: Directivos del Centro Infanta Leonor, lugar en que se celebró la gala de entrega de premios, autoridades (concejales), representantes de la Caja Rural, y premiados.
El acto fue altamente emotivo. Y se nos invitó a participar de nuevo en la próxima edición.
Debo decir que recibí una gran lección de humanidad y fortaleza de ánimo. En resumen, me alegro mucho de haber participado.
El Centro en un prodigio arquitectónico, un homenaje a la rampa, como dice su genial arquitecto, lleno de luz.
Una de las joyas que se nos ofrecieron fue la actuación de una excelente pianista y de una soprano cuya voz transportaba espiritualmente a alturas que engrandecían el alma. Eran ambas madre e hija. Dos ángeles de la música ¡Qué gran placer fue escucharlas!