domingo, 24 de octubre de 2010

Un encuentro con el Club de Lectores

El viernes tuve una experiencia que hasta el momento desconocía: me reuní con el Club de Lectura de la Biblioteca Publica de Orihuela, que había estado leyendo mi novela "El Emboscado".
Resultó una reunión amena, cálida, me lo pasé muy bien, la verdad.
Jamás había estado en un grupo así, reducido, sentados en corro, dialogando distendidamente sobre mil aspectos diferentes de esa novela y, al final, de otras novelas mías que alguno de ellos conocía.
Estoy acostumbrada a dar conferencias, a hablar de mis obras y que nadie se atreva a hacer ninguna pregunta. Sentada en la gran mesa, con el micrófono delante, veo al público desde lejos y ellos a mí, ni lo sé, seguramente me ven como alguien ajeno, al que no cabe preguntarle nada. Y yo estoy deseando que me hagan preguntas, que me digan los lectores qué detalle les agrada o les inquieta, o tal vez cuál no les ha quedado claro.
Las preguntas hacen que surjan temas que habían quedado en el tintero. Así fue en esta ocasion.
En fin, que estuvo muy bien. Y yo quería dar testimonio de ello.

31 comentarios:

Marisa dijo...

Una bella experiencia la que nos relatas,ese encuentro con quien te lee siempre es muy grato mayormente cuando es así de cercano.

Besos

Cayetano dijo...

¡Qué bueno! Me parece una idea magnífica. Una especie de libro-forum, abierto al diálogo, rompiendo la frialdad de la mesa y del micrófono. Así la gente se suelta y pregunta u opina. Me imagino que el amigo Olivier y su castradora madre saldrían a relucir más de una vez.
Un saludo.

Juan Antonio Torrón Castro dijo...

Hola Rosa, feliz tú que te gusta escribir. Es muy interesante todo lo que veo y leo en tu blog y con permiso, te sigo.

Gracias por la visita al mio y tienes razón, pero lo que me sugieres lo dejo para cuando me jubile y tenga tiempo, ahora solo disfruto de la FOTO en sí misma.

Un saludo grande.

Princesa115 dijo...

Me alegro de que la experiencia haya sido positiva.
La verdad es que en una conferencia lo mas importante es que haya un debate donde la conferenciante explique todas las preguntas que se le hagan, pero rara vez ocurre eso.

Reitero mis felicitaciones

Besos

Rosa Cáceres dijo...

Marisa, fue estupendo. Me preguntaron de todo, disfruté respondiendo y conectando experiencias y motivos de inspiración con cada una de mis novelas, porque al final salieron todas una a una.
Besicos.

Rosa Cáceres dijo...

Cayetano, se están poniendo en boga estos clubes de lectura. Este estaba integrado en su mayoría por profesores de los IES de Orihuela. hacían preguntas con mucho fundamento.
Y sí, me preguntaron por doña Yolaine, la madre de Olivier, pero salieron también a colación el abad Bonafides, el novicio Dubén, la serrana Amai, el caballero Martial de Lincy y el episodio del torneo en el pueblo.
La verdad es que ese episodio y el de la serrana me divirtieron mucho mientras los escribía.
Otra cuestión fue la de la indiferencia sexual de Olivier. Precisamente acababa yo de leer un artículo sobre personajes históricos que la habían padecido igualmente (no sé si padecer es el verbo oportuno, porque bien tranquilos que estarían), así es que pude apoyarme en datos sobre personalidades reales conocidas para apoyar que esa inanidad en materia de sexo es posible.
Vamos, que fueron dos horas de reunión y se nos pasaron sin sentir, como entre amigos.
Un saludo.

Rosa Cáceres dijo...

Juan Antonio, me gusta escribir, pero también leer y mirar y comprender. Por eso te decía que me faltaba algo, una breve explicación, un comentario personal sobre el paisaje. Aunque ya me resulta bastante interesante mirar esos escenarios que nos ofreces.

Rosa Cáceres dijo...

Princesa 115, dices mucha verdad. Cuando invito a los oyentes a pregunatr, como no se lance uno enseguida, nadie dice nada.
Recuerdo una vez en el Corte Inglés de Alicante, que sí hubo quien se atrevió y al final acabaron asaeteándome a preguntas que parecía aquello un consultorio y hubo un par de lectoras que se emocionaron. Una me abrazó llorando cuando le dediqué la novela, otra me cogía de la mano y me preguntaba que cuándo iba a voilver a dar otra conferencia...En fin, eso fue raro, lo normal es que la gente sea tímida.
¡y no me como a nadie! jajajaja

Ricardo Miñana dijo...

Seguro que fue una bonita experiencia, es un placer pasar
por tu casa.
que tengas una bonita semana.
un abrazo.

Merche González dijo...

Me alegro, Rosa, por tan interesante y enriquecedora experiencia. La cercanía siempre es fuente de conocimiento.

Besitos

Annick dijo...

Me alegro de que tu encuentro con los lectores de un Club de Lectura fuera positivo .Porque hay que reconocer que se nececita mucha valor para aguantar nuestras preguntas y criticas .
Lo digo por experiencias propias , dado que fui la iniciadora de Club de Lectura de la biblioteca del pueblo donde vivo , hace ya algo más de un año; y lo pasamos verdaderamente muy bien .
Alicante nos pilla un poco lejos , pero nunca se sabe.

Besos desde Málaga.

emejota dijo...

Tarde llego, pero bien enterada quedo. Cuando vivía en Majadahonda pertenecía a un club parecido a de estos. Lo cierto es que resultaba especialmente grato recibir a algunos autores y comentar su obra. Mucho más cálido, cercano, en resumidas cuentas,humano.
¡Cuanto me alegro que hayas escrito esta entrada! Un fuerte abrazo.

Antonio Verdú Asís dijo...

Desde luego que las relaciones con los demás seres enriquece Rosa, pero sin duda alguna a tí más que estás en la cresta de la ola. Enhorabuena amiga, eres grande como escritora pero aún más como persona.
Un abrazo.

fonsilleda dijo...

Me alegro por tí. Bonita experiencia que creo bien merecida.
Intentaré retomar costumbre para pasar más a menudo.
Entretanto, bicos.

Rosa Cáceres dijo...

Ricardo, me ha encantado tu vista, me parece además que respondí ayer, pero veo que el bicho este se ha guardado mi respuesta. Pasé por tu página y quede admirada. Enhorabuena.
Un saludo.

Rosa Cáceres dijo...

Mercedes, es verdad, yo soy una persona que va con el corazón en la mano, eso supone que me encanta mirar a los ojos y responder con sinceridad. Fue algo inolvidable, sencillo a la vez, y me dio la oportunidad de entrar en el ameno terreno de la anécdota.

Rosa Cáceres dijo...

Annik, eso de que Alicante pilla lejos...Si me organizas una reunión en tu grupo voy, de verdad, así tengo una excusa para hacer un viajecillo a Málaga.
¡Hala! Esgoged una novela mía, la leeis y yo voy con mucho gusto.
Un besico, y a ver si me dais la oportunidad de darme un paseíllo malagueño.

Rosa Cáceres dijo...

emejota, cuánto me pesa no poder corresponder a vuestras visitas, pero es que estoy desbordaíca perdía, ya no sé para dónde tirar jajaja.
Exámenes a tutipleni (en el pecado de ponerlos llevo la penitencia de corregirlos) para 150 alumnos que entran en mi lote este curso, blog, novelón y...¡pregonera de fiestas que me han nombrado! Nunca he escrito un pregón, veremos lo que se me ocurre.
Pero lo de los clubes de lectura, pues oye, que me ha encantado.

Rosa Cáceres dijo...

Antonio, yo en la cresta de la ola...pues sí, pero sólo cuando me baño en día de oleaje, porque me encanta saltar olas, y si veo que no puedo porque la ola es demasiado alta y agresiva, pasarla por debajo, sumergiéndome. Por lo demás, aquí estamos, en el montoncico anónimo. Pero soy persona que aspira a la virtud de la humildad, así es que lo que más te agradezco es que me consideres buena persona, te pasa que como tú lo eres juzgas bien a todo el mundo.
Un saludo muy cordial, a ti y a Sole.

Rosa Cáceres dijo...

fonsilleda, bienhallada, te echaba de menos. Pero no te había olvidado. Algunas veces te he visitado y he visto que andas en la poesía como ninfa en riachuelo, libre y mágicamente prodigiosa.
Un besico.

Montserrat Llagostera Vilaró dijo...

HOLA ROSA.

QUE ENCUENTRO MÁS AGRADABLE.

TUS LECTORES COMENTÁNDOTE Y TU RESPONDIENDO A SUS PREGUNTAS.

ME IMAGINO UNA TETULIA DELICIOSA.

UN ABRAZO, Montserrat

Rosario Ruiz de Almodóvar Rivera dijo...

Me alegra que lo pasaras tan requetebién eres una todoterreno.
Aunque trabajas tanto disfrutas de verdad.
ENHORABUENA¡
Un abrazo fuerte amiga, desde mi librillo.

Arantza G. dijo...

Estuviste en tu salsa...me alegro mucho Rosa.
Un beso con mucho cariño

Rosa Cáceres dijo...

MOntserreat, ¡has cambiado tu foto! ahora te veo con una dulzura de nena que me imagino que es tu nietecita, es preciosa. te hace honor.
Un besico a las dos.

Rosa Cáceres dijo...

Rosario, si que me lo pasé bien. Estoy dispuesta a repetirlo con mis lectores de cualquier sitio; si hay un grupo, voy.
Pero ya he visto en tu librillo qué viaje tan bonito has hecho...la envidia me corroe jajaja
Un besico.

Rosa Cáceres dijo...

Arantza, estuve en mi salsa, como dices, que para algo exiete una salsa que se llama "salsa rosa" jajaja.
Pero como estaba malucha (qué temporadica llevo, que parezco el delicado Vidrieras) no me quise quedar a tomar nada con ellos en el Casino. Me fui directa a meterme en la cama, y así me pasé todo el fin de semana. El lunes, arriba y al tajo, que una es cumplidora ante todo.

Verdial dijo...

Magnífica experiencia que seguro te ha enriquecido mucho. Estoy segura de que no la olvidarás.

Un abrazo

Rosa Cáceres dijo...

verdial, es cierto, no olvidaré esa experiencia. Soy una persona agradecida y cuando me hacen un honor así-porque para mí es un honor que se interesen por mi obra- está claro que lo valoró mucho.
Un besico

Sara dijo...

Hola Rosa!
gracias por tu visita y amables comentarios en mi casita virtual; yo ya había estado por aquí y tú por mi espacio, pero hacía tiempo que no me pasaba y sigo opinando que en este blog....en tu casita....hay arte puro.
Disfruta de ese otoño caluroso y de color de primavera en tu tierra, en la mía ya hace frioooooooo,sobre todo a la noche y en la mañana, aunque las tardes son primaverales.
Un abrazotedecisivo

Rosa Cáceres dijo...

Sara, el senderismo es una delicia pura cuando además se le añade esas fotos y esos comentarios sobre lo que va saliendo al paso que tú haces. Yo me reconozco más sedentaria, un ratón de biblioteca en vez de ratón de monte. Mis paseos suelen ser más urbanos o, en la naturaleza, a la orilla del mar.
Un abrazo también para ti.

María Bote dijo...

Preciosa la puerta, la estación de viacrucis, las flores... todo, amiga Rosa. Hemos de tener siempre abiertos los ojos de la sensibilidad y así, repararemos en tanta sencilla belleza que puede rodearnos.
Comprendo lo grato que pudo serte tu estancia y coloquio en el Club de Lectura. Yo he vivido esa experiencia y resulta muy enriquecedora y estimulante.
Hace mucho que no te veo por mi blog. Besos. María