Como un ser mítico, perfecto en su equilibrio, la buceadora se mantiene - vertical y serena- en el azul profundo y misterioso.
El sol brilla sobre la superficie y quiere romper con su fulgor la penumbra azul, siempre azul, del mar en su abundancia acuosa y salada.
Clama el sol, pregonando su poder y su hermosura, y su clamor derrama millones de diamantes inquietos sobre el Mediterráneo acunado por la brisa.
La buceadora se deja acariciar por el azul del mar, como de lapislázuli y aguamarina, y el blanco cegador del sol, como de zafiros y perlas finas, joyas son tangibles e inaprensibles a la vez, en paradoja inexplicable. Joyas son que seducen con rasgos de color y asombran el alma con su hermosura sin precio, tan alto es su valor.
Ella -como la mujera primera- atrapa toda la belleza primigenia de la Creación.
Ella, buceadora o sirena.
3 comentarios:
Lo cierto es que ver la imagen y sentir la fuerza de la inspiración es descubrir que todos estamos implicados en una comunicación artística. Sentir que tu alma percibe ese mensaje que tan apasionante afición nos ofrece.
Es imagen que induce a la oración.
Es un agradecimiento.
Pedro.
En efecto, eso es lo que esta imagen inspira,el la luz que místicamente bendice el alma del artista.Tú bien lo has experimentado.
A ver cuándo plasmas esta imagen en uno de tus lienzos,ya que eres un pintor excelente.
This is a most inspiring picture. Ella is both sirena and freediver.
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