martes, 9 de febrero de 2010

Dama que cose


Hoy que yo iba corriendo,
como, por otra parte, va todo el mundo en estos días,
(hay tanta obligación...el tiempos se te escapa)
me he topado con una estampa antigua
que me ha dicho en imágenes:
Cálmate, para,
detente un poco, mira,
Haz despacio las cosas,
paso a paso,
no consientas que te ahogue
la prisa inmoderada.
Es la dama, que cose en una almena,
y de vez en vez alza la mirada,
y contempla el cielo de la tarde,
dulce el color de atardecida mansa.
¿Qué labor bordará la dama bella?
Parece, en fin, la tela de una capa,
no sabemos qué es, pero sí vemos
cómo tranquila cose
con la testa inclinada.

22 comentarios:

Montserrat Llagostera Vilaró dijo...

Que bien ue haya venido a tus manos esta estampa.

Rosa no vayas acelerada. Respira y relájate un poco, que si no pasa como el fuego las virutas que sube para arriba y luego baja rápido.

Te ha quedado una poesía bordada.

Un abrazo desde la Tierra de Las Flores, de la Luz y del Amor. Montserrat

Cabopá dijo...

Este texto transmite,SERENIDAD....
Esa qué tanto necesitamos y que se nos escapa por las horas,los minutos y los segundos de cada tramo del día....Ay Rosa.....
Los agobios,el cansancio, las prisas, las cosas por hacer.....y bueno la "casa sin barre" Qué metafórica me estoy poniendo....Me gusta tú dama que cose....
Besicos.

aapayés dijo...

Me gusta siempre perderme en tus versos..

Un abrazo
Saludos fraternos...

Rosario Ruiz de Almodóvar Rivera dijo...

ES NECESARIO IR DESPACIO, PERO ES HUMANO IR DEPRISA, AY, LOS TRABAJOS,LOS HORARIOS, LAS REUNIONES....
TU DAMA ES PRECIOSA, SE NOTA QUE ESTÁ ENAMORADA, PUES SONRIE Y SUEÑA CON SU PAREJA.
¿SERÁ PARA ÉL LA CAPA?
¿TENDRÁ BORDADA UN DRAGÓN?

Un abrazo fuerte amiga,desde mi librillo

La Dame Masquée dijo...

Que bello, madame! Es el hermoso cuadro de Edmund Blair Leighton! Adoro sus estampas medievales, tan llenas de romanticismo.

Buenas noches, madame

Bisous

Arantza G. dijo...

Muy bien, relax...
Que vas muy rápido y no se puede tesoro.
Descansa un rato y otra vez a caminar...
Besitos

Rosa Cáceres dijo...

Montserrat, eso de "poesía bordada" me ha encantado, parece un juego de palabras con la poesía sobre una dama que borda.
Un beso, valencianeta de adopción.

Rosa Cáceres dijo...

cabopá, voy a todo tren, como la mayoría de la gente hoy en día. Por eso me enamora la artesanía en cualquiera de sus variedades, porque representa la labor morosa y amorosa de quien no mira el reloj al realizar su tarea.
Y en otro orden de cosas, te pregunto:
¿Qué te parece lo que está pasando en Monteagudo?
A este paso quitan el Cristo del Corcovado de Brasil.

Rosa Cáceres dijo...

Adolfo, mis versos son más que versos "repentes", frases súbitas, que nacen de mis reflexiones.
Versos, los tuyos, que leo con admiración y no te comento nunca, porque ¿qué puede ser para ti mi comentario, si ya tienes más de cien cada vez que escribes algo?

Rosa Cáceres dijo...

Rosario, yo sueño con un mundo sin prisas, es mi utopía.
Sé que una dama como esa, bordaba despacito, pero sufría a montones.
He estudiado a fondo la vida en el medievo y no era precisamente un campo de rosas, sino más asimilable al clásico "lacrimorum valle", el valle de lágrimas, y de sangre, siempre en lucha...pero la belleza de la imagen es innegable.

Rosa Cáceres dijo...

Madame, Leighton es un pintor que me encanta. Estuve tentada de pedir a mi Editorial que pusiera uno de sus cuadros para portada de mi última novela, puesto que está ambientada en la Edad Media, pero luego pensé que sus lienzos son demasiado conociados y les dejé a ellos el diseño. La verdad es que me agradó el primero que me propusieron y no necesité ver más.
Pero Leighton...es magnífico.

Buenas noches, madame.

Rosa Cáceres dijo...

Arantza, no sé ir de otra manera, pero yo misma veo que voy como una locomotora. Madrugo mucho, escribo más, doy clases y ya sabes que eso supone trabajo para casa también...
Pero a e stas horas de la noche, relax completo, tacita de infusión, película, y a dormir...iniciando el sueño ya en el sofá jajaja, que me pierdo todos los finales ¡qué marmotilla estoy hecha!

Cayetano dijo...

En este mundo ajetreado que tenemos debemos recuperar la ceremonia de la lentitud. Saborear el tiempo que pasa -¿o pasamos nosotros?- , disfrutar cada momento con lo que hacemos, porque es irrepetible. La estampa que nos traes rezuma tranquilidad, paz, cosas positivas.
Un saludo.

Antonio Verdú Asís dijo...

Hola Rosa, me gusta tu reflexión, es cierto que llevamos una vida de vértigo y se nos está pasando la vida casi sin darnos cuenta, con tantas actividades que nos hemos impuesto. A veces, hacemos un alto en el camino, casi de segundos, y nos decimos "pero si parece que fue ayer cuando..." Qué espabilados ¿verdad?. La imagen refleja cómo deberíamos tomarnos la vida "a sorbitos pequeños".
Un abrazo.

fonsilleda dijo...

Es bueno pararse y mirar, sentir como la brisa acaricia tu cara, notar los ojos que se posan en ti, acariciar una mascota, dejar que otra piel sienta la tuya, sentarte y admirar, desde la almena mientras coses o lees o tañes un instrumento, la ciudad al fondo en un atardecer cualquiera.
Bicos

Gala dijo...

Haciendo las cosas tan rápido como acostumbramos no nos damos tiempo a saborearlas.
Preciosa pintura que invita a la serenidad.

Muchos besos amiga

Rosa Cáceres dijo...

Cayetano, lo del juez que me enviaste me ha venido como a propósito, pues estoy viviendo una de esas situaciones en que el mocito o la mocita de turno exige respeto y cree tener todos los derechos del mundo.
No me tiene la cosa de muy buen humor, precisamente. Y es que vivimos en un mundo vuelto del revés. Recuerdo una novela titulada "Juegos prohibidos" en la que los niños asesinaban a los adultos ¿Llegará el caso? No sé, pero lo veo venir.
En fin, que el descanso está en el inaprensible horizonte y en la belleza de la naturaleza, no en la selva del mundo ...o del inframundo.

Rosa Cáceres dijo...

Antonio, esos sorbitos nos resultan utópicos en la vida laboral, en la que, por imperativo inevitable, marchamos al ritmo de la sirena que marca las horas.
Por eso yo siempre digo que sólo en "el dolce far niente" (el dulce no hacer nada) se halla la paz que permite la reflexión y el saborear la existencia.

Rosa Cáceres dijo...

fonsilleda, haces una lista de cosas que son buenas, y me encanta. Yo todavía la incrementaría con otros sencillos goces que proporciona la vida cuando te regala sus momentos de paz. Y hay que buscarlos, por escasos que sean y huidizos que se muestren.

Rosa Cáceres dijo...

flor, me encanta este pintor, y cada cuadro suyo me sugiere una historia.
En el caso del que he escogido hoy, me trae a la mente eos bordados laboriosos a vainica, a vainica doble, a punto de cruz...en que las mujeres daban rienda libre a su creatividad primorosa.
Ahora, ya ves, en cualquier todo a cien hay bordados en serie, y nadie aprecia esa labor paciente, que dejaba un trozo de afecto, una porción de corazón y aun del alma misma en una sencilla inicial bordada en un pañuelo.

Cayetano dijo...

Rosa, de pequeño algunas veces iba al colegio con miedo, de mayor... también. Hay niñatos y padres de niñatos temerosos, llenos de razón y derechos, deberes ninguno. Alguno debería hacer un examen para ser padre.
Ánimo y un saludo.

Rosa Cáceres dijo...

¡Ay, Cayetano! ¡Qué días estoy pasando!
Mejor no meneallo, como decían los del siglo XVII, porque los nenes y los papás "mantenella y no enmendalla".
Pero con buena piedra han topado, que antes me muero que dejarme torear.
¡Porca miseria!