martes, 29 de diciembre de 2009

SOL DE INVIERNO

Humilde, pálido, sin calor tus rayos
no queman como abrasan en estío.
Sol de invierno
de rayos espinosos,
clavado en esta puerta,
te saludo.
Y digo que en mi puerta
yo también clavar quisiera
un sol,
por que acogiera, cálido y sencillo,

al peregrino,
ofreciendo la primera sonrisa
al que va errante, sin saber a dónde
y se encuentra mi puerta en su camino.

27 comentarios:

Cayetano dijo...

Buena metáfora para empezar el día.
No es mejor sol el que más quema: sol de verano despiadado que calcina, sino el que más reconforta y libera del frío.
Seguimos hablando de soles, fuegos y quemaduras.
La llama del recuerdo arde en la memoria de Olivier, alumbrando su camino en busca de la salvación; pero al final del camino no le aguarda la hoguera. En la pira del verdugo sólo arderán sus papeles, su secreto y su pasado.
Es triste que tu novela acabe en la hoguera. ¿No lo habías pensado?
Llego a la recta final. Apenas me quedan noventa páginas.
Un saludo, amiga Rosa.

Rosa Cáceres dijo...

Cayetano, ya verás como el final no te decepciona.
Mos novelas suelen ser melancólicas, aunque siempre siempre al final hay un destellos de esperanza que ayuda a encajar el desenlace. En esta he procuradp ser optimista.
Noventa páginas dan para ciertos virajes argumentales de importancia, que pueden ser sorpresivos. Aguarda; hasta el final nadie es dichoso...ni desgraciado por completo.

Rosario Robredo dijo...

Hola Rosa, como estas? te deseo Paz, Amor y muchísima Felicidad para este Nuevo Año!!!
Hermosa semana.

Un abrazo

Rosario Robredo dijo...

Un abrazo.Con el corazón en la mano poeta!!!

fonsilleda dijo...

Tu puerta acogedora siempre. ES así, yo la percibo. Fiel reflejo de esa sonrisa que enseñorea tu rostro.
Bicos de casi año nuevo.

P.D. ¿Es casualidad o el poema nace a la sombra del próximo Año Santo de Compostela?

Rosa Cáceres dijo...

Charo, muchas gracias por tu felicitación. He intentado entrar a tu página y no me deja. Me deniega el acceso, como a bicho indeseable jajaja
Pues, nada, desde aquí: besicos, deseos de paz y alegría para ti y todo lo bueno que haya en el mundo.

Rosa Cáceres dijo...

Fonsilleda, llevo a tu ciudad en el corazón. Compostela, el Campo de Estrellas, es uno de mis lugares del alma, porque tiene alma. La tiene.
Siempre hablo de ella, del encanto de sus vetustos soportales, de sus nobles piedras y de su Gloria hecha pórtico.
Recuerdo cómo escribí varios capítulos sobre Compostela ("la Delicada piel del Alma") en sus ruas, sosteniendo a pulso el bloc, o en el hotel.
Es una ciudad que adoro.

Rosario Ruiz de Almodóvar Rivera dijo...

Tienes el sol en tu casa, pero veo que tienes el sol en tu cara y en las rápidas palabras que fluyen deprisa por tu boca y por las teclas del ordenador, como un rio
de sonrisas.
ENHORABUENA.
Un abrazo fuerte desde mi librillo.

Antonio Verdú Asís dijo...

Qué preciosidad de poema Rosa, nos ha encantado, no tienes artura. Un abrazo.

Alvaro dijo...

Hola Rosa, siempre me han gustado tus coplillas, pero en esta ocasión has escrito con el alma. Por cierto te he dedicado mi última entrada en mi blog, ya que siempre me has dedicado a mi grandes momentos en el tuyo y tu te mereces eso y más.Espero que te guste.

Rosa Cáceres dijo...

Rosario, qué amabilidad tan hiperbólica...¡Ay, si yo tuviera un sol! Le enviaría su calorcillo dorado a todos los corazones que tienen frío, por una u otra causa.
Colorearía los paisajes con un brillo de alegría contagiosa, imperiosa, exultante...¡Ah, si yo tuviera un sol!

Rosa Cáceres dijo...

Antonio, mi poema está repentizado, ni siquiere lo tengo escrito en otro lado. Yo en poesía soy así, porque sé que no es lo mío jajaja
Pero muchas gracias.

Rosa Cáceres dijo...

Álvaro, me gusta, me entusiasma, me va a servir para presumir como una loca ¡¡toma, toma y toma, pastillas de goma, que son pá la tos!!! jajaja
Que me hago el sellico, pero más cierto que ná.
Muchas gracias, generoso.
Si no correspondo no es por falta de agradecimiento, es por no hacer el ridículo, aunque como ya sabes que no tengo vergüenza, no te extrañe que me atreva cualquier día.

Pablo Marín dijo...

Hola Rosa: ¡¡¡ pueeeesss, que me ha gustado mucho el poema !!!

¡¡ Cómo se agradece el sol de invierno en esos días de intenso frío !! Luego en verano lo aborrecemos...

Un abrazo

Amig@mi@ dijo...

Curioso...
¿Qué es?
¡Un cardo?
Tú también eres de las que mira con mudhos ojos y va encontrando señales allá donde pisa.
Un abrazo

Rosa Cáceres dijo...

Pablo, siempre deseamos lo que no tenemos, sol en invierno, sombra en verano...creo que eso forma parte de la sal de la vida: tener ahnelos e ilusiones.

Rosa Cáceres dijo...

Amig@mi@, efectivamente es un cardp espectacular que he visto en la zona norte de España. Me llamó mucho la atención que allí lo clavan en las puertas de las casas y resultan preciosos, por eso hice esta foto. Me pareció un sol vegetal, sencillo y encantador.
Siempre me fijo en estos pequeños detalles que me complacen mil veces más que cualquier decoración lujosa.
Es belleza captada por espíritus que saben hallar la belleza en su entorno, y la ofrecen a los ojos del caminante. Como las flores en botes de conserva, como las piedras formando un dibujo, como la estrella de mar sobre el dintel de una puerta...¡belleza en estado natural!

Montserrat Llagostera Vilaró dijo...

Hola querida Rosa.

Grácias por esta cálida Poesía.
Tu si que eres un Sol, amiga.

Pronto te haré un nuevo pedido.

Te deseo un 2010, lleno de PAZ, SALUD, AMOR Y ARMONIA, junto con los tuyos.

Besos.Montserrat

aapayés dijo...

Un gusto compartir con vos este año que ya esta en su ruta final, y seguro seguiré siempre visitándote el próximo año..

Gracias por estar y compartir..

Que tengas una Buenísima semana, y mis mejores deseos para este año 2010 que ya esta a las puertas con nosotros..

Un abrazo muy grande lleno de cariño, respeto y admiración y que todo se cumpla en tus deseos..

Saludos fraternos

FELIZ 2010!!!

Gala dijo...

Hacia tiempo que no te visitaba y me he encontrado con unos bellos versos.

Te deseo lo mejor para el año que comienza.

Muchos besos

Cabopá dijo...

LLego un poco tarde.....Me gusta mucho tu sol de invierno..........
Te llamaré mañana... esta tarde he estado de "bureo" (hacía mucho tiempo que no oía esa palabra.....)
Hoy terminaba en la Plaza de Bellluga un espectaculo navideño de luz y sonido..SE proyectaban imagenes sobre la fachada de la CAtedral y el Palacio Episcopal...y un grupo de cantores/as cantaban ópera y villancicos.......Te hubiera gustado.......En fin Rosa que si no tengo activadad vespertina, ya sabes, me las busco..........Me encanta disfrutar de esos momentos...la calle es mi reino,ja,ja,ja....................No dejes de avisarme si vienes me encantará acompañarte. Besicos.

Rosa Cáceres dijo...

Montserrat, qué deseos tan maravillosos: Paz- eso, desde luego, lo primero- Paz exterior, y paz interior. Si una está en paz, se siente calmada, apaciguada, ya tiene la mitad de lo bueno. Y luego,salud, de cuerpo y de alma, amor, para dar a manos llenas y también para recibir en su justa medida...y además, la armonía que todo lo conjuga y perfecciona.
A viva voz te respondo:
¡LO QUE ME DESEAS A MÍ, DIOS TE LO CONCEDA A TI!

Rosa Cáceres dijo...

Adolfo, tus saludos fraternos me llenan de alegría. Sé que eres un poeta de éxito, por eso me admira que desciendas a mi cubículo de balbuceos líricos.
Ha sido una satisfacción grande conocerte y un honor inmenso recibir tu visita.
Para el año venidero, te deseo, desbordante inspiración, palabra precisa, metáforas lujosas y sinestesias de todos los colores, sabores, olores, tactos y musicalidades.

Rosa Cáceres dijo...

Gala, preciosa, qué alegría tu visita.
Ya que eres de Alicante, a lo mejor nos podemos conocer, porque el día 18 de enero (lunes) a las 8,15 se presenta en La Sede Universitaria de Alicante, en la C/ Ramón y Cajal, Aula Emilio Varela, mi novela EL EMBOSCADO (Un travestido de la Edad Media)...

ARggggggggg, qué horror, que no conozco a nadie en Alicante jajaja
¿Irá gente, no irá? ¡¡¡Hazme propaganda!!! Y si puedes ir, allí nos vemos.

Rosa Cáceres dijo...

Cabopá, te llamé y no estabas...jajaja, qué diferentes somos. La calle es tu reino y yo últimamente stoy agorafóbica. Ayer tenía que haber ido a Murcia, se reunían cuatro de mis hermanas y me llamaron ¿querrás creer que no fui? y con las ganas que tengo de verlas. Pero me entró una cosa, así, rara, un deseo de aislarme y no pisar la calle...Ya va siendo preocupante.
"Afíjate" cómo estoy jajaja "mandá a retirar", en letargo invernal, o lo que sea esto.
Siempre he sido insociable y veo que no he podido corregirme en ese rasgo de mi temperamento.
Lo de ayer no tiene perdón. Para una vez que puedo verlas...me quedé escribiendo como una loca. Me horrorizó el cercanías, pasar el Barrio del Carmen y tó, hasta la Calle Mar Menor.
¡la culpa la tiene la Estación de la Renfe de Murcia, que está en el quinto pino! ¡Hala, he dicho!

Cayetano dijo...

Tarea concluida. En efecto, el final no decepciona. Buen remate para la novela. Te mando a tu correo algunos comentarios sobre la obra, a ver qué te parecen.
Un saludo.

Rosa Cáceres dijo...

Cayetano, me alegra haber encontrado un amigo como tú, que además eres un excelente repentizador, un conocedor de la Historia y la Literaura y un buen lector.