domingo, 15 de febrero de 2009

Sin tregua

La vida no da tregua,
algunas veces,
la vida no da tregua.
Gota
a
gota
derrama su amargura,
como una estalactita,
gota
a
gota.
Y forma en el alma un sedimento
de estalagmita
atormentadora.
La vida no da tregua,
algunas veces,
la vida no da tregua.
Atosiga con golpes de tristeza,
no deja descanso en la zozobra.
Y no sabemos si mirar al cielo
o taparnos los ojos y la boca,
que no salga la lágrima del llanto,
que no llegue
el humo tóxico a la boca.
La vida no da tregua,
algunas veces,
la vida, como un caballo, se desboca.

5 comentarios:

Carmen Conde Sedemiuqse dijo...

pero todo es perfecto que suceda, para determinar quienes somos y quienes no queremos ser. Todo es perfecto. si siempre fuesemos felices no lo sabriamos. Todo tiene que acontecer como acontece
besos y amor
Nosotros somos los creadores de nuestras vidas.
je

Amig@mi@ dijo...

Ay Rosa,
Yo creo que la vida no da tregua nunca, a un momento le sigue otro, y así sucesivamente...
Muy bonita la poesía.
Besos

Rosa Cáceres dijo...

Sedemiupse ¿conoces la obra del poeta Jorge Guillén? Él opina como tú que todo es pleno, para él la vida son "las doce en el reloj". Es uno de mis poetas del 27 preferidos. El optimismo es un don, que parece que tú has recibido. Agradécelo, como haces.
Amiga, los momentos de prueba son los que realmente nos dejan sin aliento. Hay golpes en la vida...tan fuertes...-decía un poeta. Y es así.
Los versos de Miguel Hernández nos pintan de oscuro la pena:
"Umbrío por la pena, casi bruno/ porque la pena tizna cuando estalla/ donde yo no me hallo, no se halla/ hombre tan apenado cual ninguno.

divagador@ dijo...

Y es cuando se deboca que más garra hay que ponerle!! Saludos desde Uruguay, buen blogg

Rosa Cáceres dijo...

Gracias desde España. Divagar siempre es ocupación de poetas, o de pensadores, o de nefelibatas que pisan nubes en vez de prosaica tierra.hermosa ocupación.
Bienvenida a mi blog.