lunes, 9 de agosto de 2010

Lanjarón, castillo y fuentes, un paseo por la poesía del agua.

Un castillo de moros recibe en lontananza al visitante que llega a Lanjarón, en Granada.


Frente al castillo, un manantial avanza lo que será pasear por el pueblo. Yo me dejo seducir por el paisaje.


Sin orden ni concierto, os muestro algunas de las fuentecillas que jalonan las calles de Lanjarón. De ellas mana agua riquísima y también poesía, plasmada en la azulejería en blanco y azul purísima.

He refrescado mi frente y mi pelo en esta mañana calurosa, aunque no tanto en este pueblo serrano.


Una verdulería muestra la mercancía en una variedad cromática que enamora a una amante de la pintura como yo. Me asombró el calibre de esas dos calabazas expuestas.
Dentro de la iglesia aparece esta imagen de santa Ana, la abuelica, como la llaman en Jumilla (Murcia). La Madre de la Virgen María, que siempre aparece enseñándola a leer, la sostiene sobre sus rodillas mientras, a su vez, Ella sostiene a su Hijo.


Los versos de Federico García Lorca magnifican esta fuentecilla casta.

Y un balcón florido sale al paso de mi mirada.

Decidme: ¿hay algo más hermosos que un rincón lleno de flores? La mano hacendosa que las cuida reparte bendiciones para todos los que las contemplan con ojos abiertos por la sensibilidad. El sencillo goce de mirar y ver el prodigio generoso expande el alma.


Estoy en la Placeta de Santa Ana, flores y versos, fuentes y vecinas que charlan en amor y compaña a la buena sombra de las flores y los arbustos que ellas mismas cuidan...
Es un momento de unión mística con la vida sencilla, con el placer de vivir sin más ambiciones que disfrutar el agua, las flores y también "il doce far niente", ese dulce no hacer nada, sino contemplar, guardar silencio, hacer acopio de lo valioso pero intangible, la auténtica riqueza para el espíritu.



En la placeta hay un lavadero público techado del siglo XVII.



Santa Ana en una hornacina aparece flanqueada por tiestos repletos de flores, banderolas angalanan ese ámbito tomedo hace pocos días por la fiesta (el 26 de julio fue santa Ana).


Mirad lo que pone el azulejo. Os aseguro que es la definición exacta de la placeta. Eso se siente en ella.
¡Ahí es nada! ¡Paz del alma! Para mí es el mayor de los bienes. En este lugar se vislumbra y se alcanza, al menos por un momento.


Pero el visitante es inquieto por naturaleza. Quiere verlo todo, empaparse de cuanto ofrece el lugar. Y para eso nada mejor que una fuentecilla en la que puede beber la mejor agua, refrescar su rostro y deleitarse con los versos de García Lorca. Tres en uno, como el famoso lubricante, pero esta vez es tres en uno para el espíritu.


Callejón angosto por el que se accede a la Placeta que tanto me agradó.


El Pilar de las Calenturas despide esta visita.
.
El remanso del aire
bajo la rama del eco
.
El remanso del agua
bajo fronda de luceros
.
El remanso de tu boca
bajo espesura de besos
.
Así escribió García Lorca y así leemos para sentir el erotismo escondido de sus versos, entre agua, flores y estrellas, el amor reverdece en besos que son paradójicamente fuego y remanso a la vez.

25 comentarios:

Montserrat Llagostera Vilaró dijo...

ROSA GRACIAS POR ESTA ENTRADA,
ES UN REGALO.
ME HAS REFRESCADO LA MAÑANA CALUROSA DE VALENCIA, CON ESTAS FUENTES TAN PRECIOSAS.

MUCHOS BESOS, Montserrat

L. Gispert dijo...

Mar, rios y.... ¡Lanjarón!. Muy feliz estás Rosa, no faltaba más, entre la poesía del agua, exaltada por la mítica lírica de Lorca. Tus paseos destilan poesía, felicidad, al arrimo de tantas flores y frases bonitas. Estos viajes enriquecen...

Un abrazo,

Luis.

Cayetano dijo...

Bonitas fotos de rincones típicos, auténticos remansos de paz, de la localidad de Lanjarón.
Has traído algo de verdor y frescura en esta calurosa mañana de agosto.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Rosa, que bello paseo... ¡poesía del agua y de sus fuentes! más bello aún cuando la disposición de tu espíritu es acorde con esa belleza, nada más placentero que poder recorrer un lugar sin prisa, dejándonos llevar por sus calles y vericuetos, descubriendo sus tesoros... y dejar que la mente descanse regocijada en la mirada.
¡Grande García Lorca!
Me alegra tu presencia en mi blog, cariños para ti!

Amig@mi@ dijo...

Pero...
¿Y el mimbre?
¿Sabes la de tardes que pasé en ese pueblo cuando estaba recien casada?
Acompañaba a mi marido y mientras él trabajaba, yo paseaba y deambulaba entre azulejos, cerámicas y mimbres.
Entonces había un montón de tiendecitas callejeras con cosas de esparto y demás artesanías.
Recuerdo la entrada al balneario...
¿Existe aún?
Me hiciste volver al pasado.
Besos

emejota dijo...

Precioso lugar, hace años pasé por el lugar, pero no recuerdo más que eso, haber pasado, de modo que agradezco enormemente esta excursión que nos has ofrecido. Un abrazo "fresquito".

Cathy Brown dijo...

AHHHHHHHHHHHHHH PERO ESTO SE PONE CADA VEZ MEJOR!!!!!CUANTO COLORIDO...HERMOSAS CALLEJUELAS...Y LAS FUENTES QUE PRECIOSAS!!!!!VOS ESTAS UNA DIOSA TOTAL AMIGA!!!!!BESOTES,DIVINAS LAS FOTOS!!!!.

Merche González dijo...

No tengo más que agradecerte estos paseos tan magníficos. El de hoy, muy refrescante y lírico, con una guía de excepción: tú, jeje. Me encanta, incluso, el colorido que le das a las letras, cuidando todos los detalles para hacer una exposición más armónica si cabe.

Besicos, Rosa.

Rosa Cáceres dijo...

Montserrat, yo sí que me refrescaba en cada fuente de Lanjarón. Mis dedos dejaban pasar el agua helada de Sierra Nevada, y me reconciliaba con el verano infernal.
Las calles de Lanjarón y Granada estaban, algunas, entoldadas, para mitigar el sol.

Un besico, y ánimo con el calor, que ya irá amainando el muy...

Rosa Cáceres dijo...

Luis G. La verdad es que tú eres mi modelo a imitar para presentar recorridos por los paisajes y los pueblos.
Me halaga que consideres acertada mi exposición humilde de estos lugares regios en su hermosura.

Un abrazo.

Rosa Cáceres dijo...

Cayetano, creo que todos estamis ahitos de calor, agostados (nunca mejor dicho) y agotados, que hay que ver "la calor" como aplana y aplatana jajaja
recuerdo un sainete de los Álvarez Quintero sobre un pícaro que vende en Sevilla chaquetas de hombre, con mentol para dar sensación de fresco, jajaja, y las vende como rosquillas en una taberna, pero en cuanto el mentol se evapora...jajaja casi lo matan.

Rosa Cáceres dijo...

EVA, es que yo tiendo al misticismo, vamos, que me fusiono con paisajes y rincones escondidos, con detalles y aromas, con versos y brisas...Me traslado en cuerpo y alma a otra dimensión en que "siento" que ese lugar, el que sea, tiene alma, el alma de los que lo habitan y lo habitaron desde el principio de "ser", y en consecuencia yo respiro y aspiro esa esencia que es la del verdadero disfrute.
No me hace falta viajar al otro lado del mundo para visitar "mundos" interesantes y me sorprende que otras personas no perciban esa vibración osmótica y mágica.

Un besico.

Rosa Cáceres dijo...

Amig@mi@. sí que me llamaron la atención los trabajos en esparto, en especial los maguales o manguales, esa especie de pay pays de esparto para avivar el fuego que yo veía usar en casa cuando era niña a nuestra cocinera, excelente en su oficio que había aprendido en La Mancha. Hasta persé en adquirir uno, pero no sabes lo delicada que tengo la piel y me tiró para atrás la aspereza de la fibra, que seguro que me hería de sólo tocarla.
Cestería vi alguna, pero no mucha, porque yo he vivido cerca de Gata de Gorgos, y ahí sí que impresionan las labores en mimbre de los mil puestos que hay.
Sí que está el Balneario, y muchos hotelitos para turistas de aguas.

Era la segunda vez que visitaba el pueblo. Está muy concurrido.
Me alegro de haberte traído preciosos recuerdos.

Rosa Cáceres dijo...

emejota, ese abrazo fresquito que me mandas me hace envidiarte, porque si yo te mando un abrazo por fuerza tiene que ser cálido, ya que estoy en la Costa Cálida (la de Murcia lleva ese nombre)y si le dicen Cálida, ya te imaginarás por lo que es.
jajaja

Rosa Cáceres dijo...

Cathy, cuánto me alegra que te gusten mis pequeños reportajes...
El siguiente será sobre las playas de Motril y las costas de Almería.
Es una forma de que viajemos juntas tú y yo ¿no te parece?
Gracias por lo de "diosa total", vaya, que me subes la autoestima.

Un besico.

Rosa Cáceres dijo...

Mercedes, gracias por acompañarme en los paseos por Andalucía, quie es tu tierra. No soy muy hábil en el blog y tampoco tengo mucho tiempo.
Esta noche hemos venido a Orihuela porque tengo que preparar la novela para una segunda revisión, me parece que se me va a acabar hacer la vaga jajaja y que voy a tener que aplicarme en serio a esos 450 folios que mucho me temo que van a incrementarse, porque tengo unas cosillas investigadas que tengo que adicionar a la acción

Me resisto a dejar el blog en dique seco, pero a lo mejor no me queda más remedio.

Ya lo diré. Porque tengo que preparar también unas colaboraciones que me han pedido para una publicación. Voy a aceptar hacer una, pero voy a declinar la otra...¡No puedo más!


Un besico

Cabopá dijo...

Rosica
Las Alpujarras,son preciosas,Capileria,Cadiar,Lanjarón,Berchules, Trevelez, ect...
Yo estuve hace unos cuanticos años y volví maravillada de tanta riqueza artistica y paisajistica...
Hasta la vuelta besicos...

Rosa Cáceres dijo...

cabopá, creo entender que ya te vas de turismo a tierras del norte, afortunada tú, que hoy estoy en Orihuela y recrujen los adoquines jajaja

Un besico.

ARO dijo...

Un muy agradable paseo por Lanjarón, con tus fotos y comentarios. Esos pueblos de la Alpujarra granadina son una preciosidad.

Annick dijo...

Que paseo mas agradable ; con el calor que hay por aqui !!!
Me ha entrado las ganas de visitar este pueblo tan refrescante .
No estamos tan lejos , asi que para septiembre me doy una vueltecita para conocerlo .

Besos desde Málaga.

Rosa Cáceres dijo...

AROBOS, tienes toda la razón. Esdta vez no he ido más que a Lanjarón, pero hace años fuimos a varios, entre ellos el famoso Trevelez...¡qué jamón!
Es precioso todo aquello.

Un saludo.

Rosa Cáceres dijo...

Annick, y que lo digas, lo del calor es apabullante. Hoy hemos venido a Orihuela y he creído que me daba algo...¡Me vuelvo a Mazarrón ya mismo!
Un besico.

Carzum dijo...

Precioso paseo y lindos versos de Lorca, Rosa. Abrazos ;-)

Rosa Cáceres dijo...

Carzum, García Lorca corresponde con su genialidad a la genial belleza de Granada y su pueblos.

Amig@mi@ dijo...

Gracias Rosa. Seguiste reavivandolos, y eso que no llegaste a comprar elmangual de esparto.
¿Sabes?
Aquí hay un hombre muy mayor, que se dedica a hacer cestos y otras cosas y a vendarlas deambulando por la calle.
Me da pena, y precisamente hoy, le compré un sombrero de paja.
jaja
Qué casualidad.
Besos y la mayor de las suertes con tu novela-