miércoles, 3 de agosto de 2011

Una exposición de Conchita Sánchez Lorente

Durante todo el verano está vigente la exposición de pintura de Conchita Sánchez Lorente, en la Calle Mayor en el Puerto de Mazarrón.
Conchita es una nostálgica de los paisajes mazarroneros cuando aun permanecían vírgenes e incontaminados por el aluvión turístico.
Le seducen los paisajes de mar con olas rompientes.
Y la estética de los años cuarenta y cincuenta.
Los personajes característicos de los veranos de tiempos ya pasados, como este chambilero con su carrito de helados artesanales.
O estos viejos que han comprado en la desaparecida tienda de comestibles de Juan Vivancos, como se puede leer en la capaza.
El atardecer en La Azohía es esguramente el inspirador de algunos de sus versos, porque Conchita escribe poesía y la recita especialmente bien.
Otra playa a la misma hora del atardecer. El mar se torna dorado por el reflejo del sol poniente.
Un patio de una amiga suya, lleno de flores.
Porque a Concha le encantan las flores, en patios, en ventanas, en balcones...
Y en jarrones.
Es una mujer andarina, de largas caminatas en solitario, a solas con sus pensamientos y la Naturaleza. Alguna que otra vez pasa por mi casa, aunque esté cerrada, entra al porche y se sienta en un banco, quita las hojas secas de mis macetas...Si estoy, suele llamar y rápidamente nos saluda apenas y nos deja un ramo de flores silvestres.

Alicia en el país de las maravillas es uno de sus temas más repetidos. Yo subo aquí tan solo uno de sus cuadros sobre ella.
En la Galerica (dos peñascos en mitad del mar en el Puerto de Mazarrón, hay una luz desde hace unos años, para evitar que algún barco se estrelle en las rocas. La verdad es que la ha puesto sobre un soporte de cemento feísimo, que no creo que le guste a ninguno de los que teníamos La Galerica como un referente paisajístico sentimental. Tal vez por eso Concha, que adora esa estética de los cuarenta, imagina a la Betty Boo como una especie de Coloso de Rodas sosteniendo la luz sobre esas dos queridas peñas, bajo una luna sonriente y amable de verano.
Si os fijáis, veréis que a la izquierda hay un texto: Concha cuenta la leyenda (que ella inventa) de una bella sirena de las playas de Mazarrón.
¿Bella, verdad?
Esta "casa colorá", la tengo yo pintada en un ladrillo, fue un regalo que Concha me hizo el dia de la presentación de mi novela "El Emboscado", este invierno, en la Universidad Popular de Mazarrón, en que actuó ella de presentadora.
Y una escena playera con dos bañistas jugando con el agua.
****
Me enorgullezco de tal amiga.

19 comentarios:

Ana dijo...

Haces bien en estar orgullosa de ella,la amistad hay que cantarla a los cuatro vientos. Las pinturas una verdadera maravilla, me han encantado, la naturaleza y sobre todo el mar se presta mucho para ser retratada a mano,la mano de tu amiga.

Un abrazo.

Vinicius Carvalho dijo...

¡Qué hermoso!

Gracias por darme esta maravilla!

Cuando escribo me siento como si mi alma pintada y colgada en la pared del alma de mis lectores.

Un beso enorme y una gran tarde!

Estoy esperando en el alma!

Montserrat Llagostera Vilaró dijo...

Hola Rosa.
Gracias por compartir estos cuadros de tu amiga Concha.
Sabes el de la barca con las chicas y el de los abuelos con el gallo me encantan.
Bueno me gustan todos, per los que te digo les veo algo especial.
Besos, Montserrat

chus dijo...

Que bonita amitad, y el detalle para los barcos, es como yo digo, un señor sueña de noch-e, al dia siguiente zas lo hace, o lo manda, y a callar. un abrazo

L. Gispert dijo...

Que bien pinta, Rosa. Tu amiga es una estupenda pintora. Díselo. Dile que sabe ajustar muy bien los elementos cromáticos y ambientales de cada tema. Domina la técnica y esta aptitud se nota. Dale la enhorabuena.

Un abrazo,

Luis.

Cabopá dijo...

Es que tienes unas amigas que como tú son artistas...Me han gustado mucho los de la estética de los cuarenta, ese chambilero, que recuerdos, los polos de limón y los de arroz con leche,y esas "macetas de matecao"...
Creo que iré el sábado por ahí, ya se que te vas a Jaén. Si puedo iré a ver la exposición.
Besicos salados amiga.

Rosa Cáceres dijo...

Ana, es verdad lo que dices, el mar es un buen motivo y un buen modelo. Y la amistad es sagrada.
Un besico

Rosa Cáceres dijo...

Vinicius, qué bonitas palabras para expresar tu sentimiento al escribir en el blog "como si mi alma estuviera pintada y colgada en la pared del alma de mis lectores".
Tienes razón, al escribir, exponemos el alma, aun sin querer. Ocurre igual que cuando escribimos, ya sea novela o poesía...nos damos a conocer sin remedio.
Un saludo

Rosa Cáceres dijo...

MOntserrat, creo que congeniarías con Concha, esos que dices son de sus preferidos; ella me ha confesado que disfruta muchísimo cuando pinta ese tipo de motivos.
Si vieras su casa... ¡es una verdadera exposición! y abundan los cuadros de personajes parecidos, junto con los paisajes queridos, pero siempre del ayer.

Un besico

Rosa Cáceres dijo...

Chus, los barcos son una preciosidad, y este que pinta Concha, tripulado por tres muchachas, un encanto.

Un besico

Rosa Cáceres dijo...

Luis, se lo diré cuando la vea, y seguro que se alegrará mucho. Ocurre que no nos vemos demasiado, porque sus horarios y los míos son opuestos; a ella le gusta crear su obre por la noche, se pasa esas horas en su estudio y duerme de día, hasta tarde. Yo me acuesto antes de las 12, pero madrugo mucho, y si estoy en vena de escribir, puede ser a las cuatro o así...De modo que no hay manera, y menos ahora que voy a bañarme a otras playas que no son el Puerto, que está hasta los topes, mientras que yo prefiero la tranquilidad, creo que ya lo muestro en mis entradas jajaja

Un abrazo

Rosa Cáceres dijo...

cabopá, y una de esas amigas se llama Carmen, vive en Murcia y veranea en Cabo Palos ¿la conoces? jajaja
¡Qué casualidad lo del sábado! Otra vez será.
Yo también me acuerdo de los chambis, pero fíjate, se me había olvidado lo de la palabra "maceta" de helado, y menos mal que tú me la has recordado. Ahora decimos "barquillo", nos hemos vuelto "mú fisnos".

Un besico

anna dijo...

Rosa preciosos cuadros, gracias por compartirlos con tod@s nosotr@s.

Un placer volver a tu rincon, y disculpa mi aussencia por estos mundos.

Un abrazo grande.

Rosa Cáceres dijo...

anna, la ausencia no quiere decir nada, recuerda esa famosa coplilla
Tengo a mis amigos
en mi soledad,
cuando están conmigo
¡qué lejos están!
Es decir, se puede estar ausente y sin embargo seguir "ahí".
Gracias por visitarme
Un abrazo

Myriam dijo...

Si anduviera por la zona, con gusto vería la exposición de tu amiga. yo también las tengo pintoras.

Gracias, Rosa, por llegar hasta mi casa y permitirme así, llegar hasta la tuya. Te enlazo, iré leyendo entradas antiguas tuyas con calma. Felicitaciones por todas tus publicaciones literarias.

Un abrazo

Rosa Cáceres dijo...

Myriam, bienvenida, eres muy amable. Me encanta que te hayas enlazado a mi blog y te lo agradezco mucho.

Un abrazo

Rosario Ruiz de Almodóvar Rivera dijo...

Llevo días sin comentar en los blogs, pues estoy sin Internet en el Cabo de Gata, hoy aprovecho un huequecito para visitar a las amigas.
Ehnorabuena por ese premio, sé que estarás contentísima, enhorabuena por tu amistad, me gustan mucho los artistas y tú además de serlo te rodeas de montones de ellas...
Y Mazarrón es precioso, las playas solitarias me encantan esas que has fotografiado.
Tengo que volver a escribir porque estoy, con los pensamientos en desorden y solo se ponen firmes cuando esmpiezo a rellenar cuartillas.
Aunque no te comente, aquí estoy.
Un abrazo fuerte amiga, desde mi Librillo.

Rosa Cáceres dijo...

Rosario, este comentario que me has hecho vale por mil, muchísimas gracias. Yo te tengo considerada como una de mis amigas, y te pido perdón porque ytampoco yo comento todo lo que debiera, lo que pasa es que estoy escribiendo bastante estos días de verano, y eso me resta tiempo.
Mañana recibo el premio, sacaremos fotos para compartirlas con todos.
Un besico

María Bote dijo...

Gracias, Rosa, por compartir con nosotros tan magnífica exposición ¡Es una preciosodad! Me encanta, y, por rendir homenaje a la amistad. Opino que es uno de los mayores tesoros que pueden poseerse.

Te echo de menos por mi blog. Ya me despido hasta septiembre pues nos vamos a Cadiz, a disfrutar del mar que tanto necesito. Su rumor, su luz, su canción y tantas y tantas cosas que emanan de él. Son un bálsamo auténtico para mi espíritu, amiga.

Un abrazo aromado de sales y algas. María